Este, es el monumento más representativo en la Ciudad de Puebla. Tardó 300 años en ser construida. También, la conocen como Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción. Está ubicada en el centro histórico de la ciudad, el cual fue declarado Patrimonio de la Humanidad. Tiene una fachada de estilo renacentista. Fue construida por el arquitecto español Francisco Becerra en 1575. En julio de 1940, el Obispo Juan de Palafox y Mendoza llegó a la ciudad. La construcción de la catedral se detuvo en 1626, ya que los fondos económicos se acababan. Así que, el obispo dio impulso definitivo a los trabajos de construcción que habían avanzado lentamente. El obispo Palafox consagró la Catedral de Puebla el 18 de Abril de 1649, aunque todavía faltaban las fachadas y las torres (las cuales tardaron casi dos siglos en ser construidas). Estas torres, son las más altas de todas las catedrales latinoamericanas (miden 70 metros). La catedral se organiza en 5 áreas (una central, dos laterales, y dos capillas). El altar mayor fue diseñado por Manuel Tolsá y construido entre 1797 y 1818; ahí, están los restos de obispos poblanos.
Nos pareció increíble este lugar. No estábamos conscientes de que en México pudiéramos encontrar construcciones tan hermosas y con tanta historia detrás como esta. Nos impresionó en tamaño de la catedral, y el estilo arquitectónico que tiene por dentro y por fuera. Tiene muchas figuras religiosas, los altares hermosos, acabados de oro, un estilo Europeo. Nos llamó mucho la atención, que tiene elementos muy únicos como una campana que pesa 1o toneladas, las torres más grandes de Latinoamérica, y más. El altar mayor, se parece un poco al que está en el Vaticano. También, está una joya del barroco mexicano: la cúpula pintada por Cristóbal Villalpando. Los techos y las cúpulas nos dejaron impactadas. Sin duda, visitamos una de las catedrales más bonitas de México y del mundo.
Nos pareció increíble este lugar. No estábamos conscientes de que en México pudiéramos encontrar construcciones tan hermosas y con tanta historia detrás como esta. Nos impresionó en tamaño de la catedral, y el estilo arquitectónico que tiene por dentro y por fuera. Tiene muchas figuras religiosas, los altares hermosos, acabados de oro, un estilo Europeo. Nos llamó mucho la atención, que tiene elementos muy únicos como una campana que pesa 1o toneladas, las torres más grandes de Latinoamérica, y más. El altar mayor, se parece un poco al que está en el Vaticano. También, está una joya del barroco mexicano: la cúpula pintada por Cristóbal Villalpando. Los techos y las cúpulas nos dejaron impactadas. Sin duda, visitamos una de las catedrales más bonitas de México y del mundo.